Esta semana toca artículo, pero justo a principios de este mes ha sido publicado una revisión anual que nos parece tan importante que no podemos obviarlo.
Y es que “The National Hip Fracture Database’s (NHFD)” y el comentario de este del Royal College Physicians británico, organismo responsable del documento, es toda una llamada de atención para los cuidados tras al alta hospitalaria tras una fractura de cadera.
Y es que comienzan reconociendo que la colaboración entre traumatología y geriatría ha mejorado los cuidados del paciente en muchas áreas. Pero enseguida hacen hincapié en que estas colaboraciones en ocasiones están focalizados en los cuidados agudos, con poca influencia en la rehabilitación a largo término.
Por lo que recuerdan que el trabajo multidisciplinar a largo plazo ha mejorado no sólo la vivencia del paciente y su recuperación, sino que también ahorra dinero al NHS al reducir la duración de la estancia y el número de reingresos.
Finalmente hacen una llamada de atención a que estos programas de fractura de cadera incluyan todo el camino para los pacientes frágiles, incluyendo no sólo la cirugía y el periodo periquirúrgico temprano, sino también el ambulatorio, incluyendo la rehabilitación y los servicios comunitarios, incidiendo en que todos los pacientes deberían estar seguidos por un periodo de 120 días como parte integral de su atención.